Resumen
Las consecuencias y situaciones que debe enfrentar una persona al despertar y quitarse las vendas impuestas al pueblo por la política y la sociedad, un ciudadano que no quiso callar, y la reacción de los ¨Poderosos francos¨ frente a una mirada visionaria y revolucionaria.
Abstract
The consequences and situations that a person must face when waking up and taking off the bandages imposed on the people by politics and society, a citizen who did not want to be silent, and the reaction of the “Poweful Franks” in front of a visionary and revolutionary look
Palabras claves: Derechos Humanos, Exilio, Literatura.
Esta ponencia tratará de mantener la mirada crítica en el ejercicio político de sociedades propias de países aparentemente indiferentes a la esclavitud o a la dependencia en la que viven, y frente a las acciones de unas minorías que ha decidido gritar, reaccionar, e indignarse. Las preguntas serían, entonces, cómo un pequeño grupo puede lograr despertar la conciencia de una nación y generar cambios, cómo desde la literatura se puede motivar a pensar y a pensarse en contextos con estas problemáticas.
En primer lugar está la vida del hombre castigado por informarle a su pueblo lo que él estaba viendo en su país. Mario Benedetti comienza su destino sintiendo un conjunto de dudas e inconformidades producidas por la realidad de su nación en donde todo en el aire es politiquería barata, mentiras, opresión y silencio. Él, es considerado como anormal por tomar una de las decisiones más importantes de su vida: no callar, defenderse con hechos y argumentos, entreteniéndose más al hablar en periódicos como el diario, Puntos Finales y la mañana; o publicando en criticas cinematografías y teatrales, crónicas con seudónimo y hasta letras de canciones¨1 (SALTERAIN, 1923); pero lo más indirectamente exquisito, sus textos, novelas y libros.
Pero, ¿a qué me refiero con el término de indirectamente? Pues Mario Benedetti, refleja en sus obras una denuncia respecto a recurrentes violaciones de los derechos humanos, la situación política, y por su puesto al exilio: “Se de varios jubilados que no fueron capaces de sobrevivir a esa interrupción de la rutina. Pero esa gente que se ha ido endureciendo, anquilosando, que virtualmente ha ido dejando de pensar¨2 (BENEDETTI, 1960).
Aún así, hemos perdido la identidad, le hemos entregado a los demás el control de nuestra vida para que jueguen a perder y a ganar lo que ya para nosotros no tiene sentido, porque la mayoría está muerta, su corazón esta pálido y en sus venas solo corre la aterradora rutina ordenada, por estas pocas razones nos meten los dedos en la boca, en los oídos y nos rasguñan el corazón, con los pocos sentimientos que han sobrevivido; Benedetti estaría de acuerdos con lo inferido, pues toda su vida intentó poner las palabras anteriores en la mente de su pueblo…¨ “Los rebeldes han pasado a semirebeldes, los semirebeldes a resignados. Yo creo en este luminoso Montevideo, los gremios que han progresado más en estos últimos tiempos son los maricas y resignados¨5 (BENEDETTI, 1960).
Y ahora nos preguntamos ¿de quién es la verdad? Por ahí dicen que hay tres verdades: la tuya, la mía y la verdad, en la vida diaria, en el robo diario, la verdad la tendrá el poderoso, juzgando de una supuesta buena manera y castigando del ¨modo correcto¨; Benedetti era poderoso pero él hacía parte del pueblo, así que no tenía la razón y por ¨mentiroso¨ serÍa castigado. Benedetti fue sancionado por sus pensamientos y actos, orientados al bienestar de su país.
La realidad que vivió Benedetti no está tan alejada de la actualidad, existe un lugar casi de hacinamiento, el cual se ha encargado de lavar el cerebro de su pueblo, convirtiéndolo en un país de barrotes grises con burros adentro, con burros llenos de temor y miedo hacia el ¨Supremo¨: “El cuerpo es tuyo, la mente le pertenece al Gran Líder: Habla Kim Joo-il, un excapitán del ejército norcoreano que desertó en 2005”.10 (CLEMENTE, 2015) conocido como Corea del Norte, y dirigido por el presidente Kim Il-sung.
¨Los norcoreanos llevan su insignia del Gran Líder, hay retratos y más de 35.000 estatuas de Kim Il-sung y su hijo Kim Jong-il por todas partes, altavoces que transmiten la propaganda gubernamental, la televisión solo hablan de los Grandes Líderes. El régimen controla totalmente a la población, la priva de cualquier atisbo de humanidad, la trata como a soldados y esclavos y la infantiliza conscientemente. Además, es una sociedad donde todos vigilan a todos¨11 (DIEZ, 2013).
¿Cómo es posible que un pueblo entero permita que sus derechos sean vulnerados de tal manera que ni siquiera puedan escuchar música de cualquier género o algo tan simple como ver televisión en familia?, ¿es tan grande el poder que pueden generar los de arriba como para tomar nuestras decisiones y controlar de manera obsesiva nuestra vida? Claro ejemplo de exilio del cual ni siquiera hay posibilidad, en donde los ciudadanos conocen que por lo que están pasando no es vida sino muerte en vida, pero ¿cómo se denuncia, o se protestar ante un régimen que puede acabar con nuestra familia, con nuestra <supuesta> vida, con nuestros exterminados sueños?
La mayoría de Norcoreanos desearían el exilió, escapar del corral y poder tomar decisiones con su propia vida, siendo ambos ejemplos, el de Corea del Norte y el de Benedetti sustantivos de exilio, algo particular que los desafortunados sufren al nacer con ansias de revolución, desarraigándolo de su hogar, de su país, de su familia, amigos y de aquellos recuerdos que crecieron en el lugar que le produjo el camino. Un destino duro para cualquier compatriota, que siente un rechazo de parte de su país y se ve obligado a salir, a progresar en otra parte, mientras su lugar de origen se queda ahora en una protesta de 2 personas con temor a actuar por la verdad, comenzando desde cero en un lugar desconocido, sólo pero fuerte por las situaciones vividas en un país de constante guerra silenciosa.
Por: Mabel Carrero
Bibliografía
BENEDETTI, M. (1960). La Tregua. Montevideo: Seix Barral, BIBLIOTECA BREVE.
CLEMENTE, E. (24 de Marzo de 2015). «Corea del Norte es el lugar más horrible del mundo». La voz de Galicia.
DIEZ, P. (16 de abril de 2013). Kim ll-Sung ¨El presidente Eterno¨ de Corea del Norte. ABC Internacional.
RUFFENILLI, J. (1976). MARIO BENEDETTI: ENTRE EL EXILIO Y EL DESEXILIO.
SALTERAIN, J. (1923). Mario Benedetti. Montevideo: Fundación Mario Benedetti.